Aconfesional.

El Reino de España es aconfesional.

Está establecido en la Constitucion española. Por tanto, todos, los españoles, y las instituciones que formamos entre todos España, nos debemos a lo dicho en la Constitución.

Las procesiones de Semana Santa, como expresión religiosa de la Iglesia Católica, está muy bien, y como expresión cultural del pueblo español, está mejor. Debemos mantenerlas, deben mantenerlas los cofrades, y los españoles que sean religiosos pero católicos, pues existen otras religiones, que no quieren saber nada de las procesiones.

El artículo 18 de la Constitución, declara la libertad religiosa. Por tanto todas las religiones pueden actuar, conforme a la ley civil, y practicar sus cultos líbremente.

De modo, que las instituciones, no pueden hacer acto de presencia, en los cultos de algunas resligiones y no en otras. Lo lógico, lo democrático, es que la Guardia Civil, la Policía Nacional, y cualquier cuerpo militar, no participen en los actos de culto, tanto público, como privado.

Estamos en un Estado democrático, y siempre son importantes los signos externos de cualquier país, y más en España, que vivimos casi toda nuestra vida, en la calle. Primero la Navidad, después la Semana Santa, y siempre las fiestas de cualquier lugar. Y además trabajamos como los ciudadanos de cualquier país, sino más.

Puede que a los protestantes, no les guste demasiado, como motivo religioso las procesiones, pero como estética, como movimiento cultural, son de las manifestaciones, más importantes de cualquier cultura.

La imaginería española, es una de las mayores aportaciones hispánicas a la escultura universal.

Pero no implica, que después del franquismo, sigan escoltando las procesiones, la Guardia Civil, y los demás cuerpos de Seguridad del Estado, ni los cuerpos del Ejército.

Las procesiones, y los demás actos deben ser cosa de cada cofradía, dentro de la Iglesia Católica, pero no un acto donde cada institución del Estado deba estar representada por sus titulares de ése momento. Otra cosa es que particularmente cada uno se represente a sí mismo.

Alguién se imagina a los grupos de Are Chisna, escoltados por la Guardia Civil, cuando van por las calles con sus cánticos. Pues deduzcan.